Sigue lo difícil.

Odio esta parte de mi, la odio con toda mi alma. ¿Porqué no fui creada con valentía y con elementos que me hagan ser más abierta y con más facilidad a decir lo que quiero?... sin importarme lo que piensen los demás. No se como volver a hablarle, nunca puedo empezar nada, porque no me da el cuero para afrontar situaciones en las que pueda salir lastimada. Quiero ser como quiero ser, no como soy actualmente. Quiero cambiar un montón de cosas pero tengo miedo a la reacción. Quiero decirle: "hola" y empezar una conversación pero no puedo, como siempre.

MOMENTO DEL DÍA: Algunas veces tengo que gritar y no puedo, todo me lo guardo... después estallo y es peor, algunas veces llego al límite: no me gusta que la gente que no la coincidero dentro de mis afectos me de ordenes, solo por estar pasando un mal momento o que haga ME sentir mal y dolida. Odio estos momentos en que cuando uno necesita un amigo se da cuenta que ese amigo no está, que ese amigo de toda la vida no está y que otro amigo... que es de menos tiempo está y no solo para una cosa, sino para todo.
Después de mucho tiempo descubro algo: la amistad de niños no es coinderada futura, uno busca una amistad duradera cuando siente que sabe elegir, no dejes que te impongan una amistad y que te cuando sientas sola y necesites de su ayuda esa amistad no esté, uno con el tiempo se da cuenta quienes son sus verdaderos amigos y quienes solo son "máscaras amistosas" de hace años. Los amigos ayudan, defienden y NO CALLAN.