Para pensar.

Esta es la historia de dos jóvenes. Ambos en moto se dirigian a un paseo, él maneja muy rápido por lo que le pidió que bajara la velocidad. Él bajaría la velocidad únicamente si ella le decía te amo. Ella le dijo te amo pero al parecer no era suficiente, él pidió un abrazo. Ella entre medio del miedo se lo dió y le pidió de nuevo que bajara la velocidad, él no la bajaba. Ahora él pidió que le sacara el casco para que se lo ponga a ella. Ella se puso el casco esperando que él bajara la velocidad y él seguía sin concederle ese deseo. Al día siguiente se informa en los medios un accidente, al parecer dos jóvenes en moto habían sufrido un choque. Él sabía lo que iba a suceder, sabía que no tenía frenos en la moto entonces le pidió que ella le diga todo lo que quería escuchar, la amaba tanto que lo único quería disfrutarla hasta en sus últimos minutos. Él murió y ella lo lloró.

Esta historia nos sirve para aprender a decir lo que sentimos. ¿Por qué esperar a decir palabras de amor a quién amamos y expresar cariño a quién queremos? No hay tiempo para esperar. Hoy es el día para hacer feliz a quién tanto querés.